¿Cómo aumentar el rendimiento graso de la aceituna? 

Índice de contenidos

Estrategias para aumentar el rendimiento graso y adelantar la cosecha en el olivar

Aumentar el rendimiento graso de la aceituna es uno de los principales objetivos de los productores de aceite de oliva, ya que garantiza un mayor aprovechamiento del fruto y una rentabilidad optimizada. 

Vamos a ver técnicas y estrategias efectivas para optimizar el rendimiento graso de la aceituna y factores cruciales en el éxito de una campaña de olivar.

Qué es el rendimiento graso de la aceituna

El rendimiento graso de la aceituna se refiere a la proporción de aceite que se puede extraer del fruto, y se expresa como un porcentaje. 

Este rendimiento depende de numerosos factores, incluyendo la variedad de la aceituna, el estado de maduración del fruto, las prácticas de cultivo y las condiciones climáticas

Un rendimiento graso elevado significa que por cada kilogramo de aceitunas procesadas se obtiene una mayor cantidad de aceite, maximizando así la productividad del olivar.

Cómo optimizar el rendimiento del olivar por hectárea

Para lograr un rendimiento óptimo en el olivar es necesario implementar prácticas agronómicas que maximicen tanto la cantidad de aceitunas producidas por hectárea como el contenido de aceite en cada fruto. Las técnicas de manejo, fertilización y control del agua son claves en este proceso.

Manejo del suelo y la fertilización

El manejo adecuado del suelo es esencial para asegurar una buena absorción de nutrientes y, en última instancia, una mayor acumulación de aceite en el fruto. La fertilización debe enfocarse en:

  • Nitrógeno: Promueve el crecimiento del árbol y el desarrollo del fruto, lo que incide directamente en la producción de aceitunas por hectárea.
  • Potasio: Es fundamental para la síntesis de aceite y es un nutriente clave en el desarrollo de frutos con alto rendimiento graso.
  • Fósforo y otros micronutrientes: Su presencia favorece el metabolismo energético de la planta y el crecimiento de la raíz, mejorando la capacidad de absorción.

Riego controlado

El riego deficitario controlado es una técnica que consiste en suministrar menos agua durante ciertas fases del desarrollo del fruto.

El estrés hídrico controlado estimula la acumulación de lípidos, incrementando el contenido de aceite en el fruto. Esta técnica, si se aplica correctamente, puede elevar el rendimiento graso sin comprometer la salud del árbol. 

Existen otros tipos de riego, peor no son tan efectivos como el riego controlado cuando se trata de mejorar el rendimiento.

La importancia de adelantar la cosecha en el rendimiento de las aceitunas

Adelantar la cosecha permite obtener un aceite de mayor calidad, con un perfil organoléptico más atractivo y mejores propiedades antioxidantes. Sin embargo, un equilibrio entre el momento de cosecha y el rendimiento graso es crucial. Las aceitunas verdes, recolectadas anticipadamente, producen aceites con alto contenido de polifenoles y antioxidantes naturales, pero en menor cantidad.

Adelantar la cosecha también tiene otras ventajas importantes:

  • Prevención de plagas y enfermedades: Permite evitar daños por mosca del olivo y otras plagas.
  • Evitar pérdidas por sobremaduración: Las aceitunas sobremaduras pierden peso y calidad, reduciendo el rendimiento.

Cuál es la mejor estrategia para aumentar el rendimiento de la aceituna

No existe una única estrategia para aumentar el rendimiento graso. El éxito radica en la combinación de varias técnicas en función de las condiciones específicas del cultivo y el entorno. Las prácticas más efectivas incluyen:

  1. Selección de variedades adecuadas: Variedades como la Picual y Cornicabra suelen tener rendimientos grasos más altos.
  2. Aplicación de técnicas de riego deficitario: Ayuda a optimizar la concentración de aceite en el fruto.
  3. Fertilización específica: Focalizar en potasio y otros nutrientes clave.
  4. Control de plagas y enfermedades: Previene pérdidas de rendimiento por infestaciones.

Optimización del rendimiento graso en la fase final del olivo: bioactivos naturales y control de plagas clave

El rendimiento graso del olivo no solo depende de los cuidados durante el crecimiento, sino también de la gestión en la fase final de desarrollo del fruto, donde aspectos como la aplicación de bioactivos y el control de plagas son decisivos.

Rendimiento graso en la fase final del olivo

Durante las últimas semanas antes de la cosecha, el fruto entra en una fase de lipogénesis, en la cual la aceituna incrementa su contenido de aceite. 

Es fundamental evitar factores de estrés y aplicar productos bioactivos que estimulen la acumulación de lípidos en esta etapa final, optimizando así el rendimiento graso.

Estrategia Integral para maximizar el rendimiento

Implementar una estrategia integral basada en la nutrición, el riego controlado, el uso de bioestimulantes y el manejo de plagas asegura que el olivo dedique toda su energía a maximizar la producción de aceite.

Recomendaciones para la Aplicación

Para maximizar el rendimiento graso en esta fase:

  • Aplicar bioestimulantes a base de extractos naturales, que estimulan la síntesis de aceite en el fruto.
  • Controlar la presión de plagas mediante monitoreo regular, especialmente en lo que respecta a la mosca del olivo.
  • Regular el estrés hídrico de manera controlada, evitando la sobrehidratación que podría diluir el contenido de aceite en el fruto.

Cómo incrementar la producción en el olivo

Aumentar la producción total del olivo no solo implica incrementar el número de aceitunas, sino también asegurar que cada fruto tenga un contenido de aceite alto. A continuación, se detallan los factores nutricionales y prácticas de manejo que inciden en la producción.

Nutrición vegetal y producción del olivo

Una nutrición balanceada asegura que el olivo tenga los elementos necesarios para maximizar la producción de aceitunas con alto rendimiento graso.

Nitrógeno

El nitrógeno es esencial para el crecimiento vegetativo y la formación de frutos. Es clave aplicar dosis controladas para evitar un crecimiento excesivo de ramas y hojas, que puede desviar la energía del árbol y reducir el rendimiento graso.

Boro y Nitrógeno

El boro actúa junto al nitrógeno favoreciendo el cuajado del fruto y la calidad del aceite. Su aplicación en los momentos de prefloración y post-cuajado asegura frutos sanos y con alto contenido de aceite.

Potasio

El potasio es el mineral más importante para la síntesis de lípidos. Una correcta fertilización potásica en el olivar favorece la acumulación de aceite en la aceituna, aumentando el rendimiento graso.

Otras prácticas que influyen en el rendimiento del olivar

Existen otras prácticas, además de la nutrición, que inciden en el rendimiento graso, como la poda adecuada, la cosecha en el momento óptimo y el manejo de suelos.

Consejos sobre el rendimiento en olivo

  • Incrementar el peso y tamaño de las aceitunas: Aplicar reguladores de crecimiento en la fase de desarrollo del fruto.
  • Reducir la vecería: Estabilizar la producción del olivo mediante poda y fertilización equilibrada.
  • Aumentar la floración y fructificación: Aplicar tratamientos con bioestimulantes en prefloración.
  • Incrementar el contenido de aceite en las aceitunas: Regular el estrés hídrico y ajustar la fertilización potásica.
  • Impulsar el crecimiento en olivos jóvenes: Enfocar en un plan de fertilización y riego adecuado para el establecimiento del árbol.

Multiplica el rendimiento graso de tus aceitunas

Para obtener el máximo rendimiento en aceite, es importante considerar todos los factores agronómicos y climáticos que afectan el cultivo de la aceituna.

Lipogénesis de la aceituna

La lipogénesis es el proceso mediante el cual las aceitunas acumulan aceite. Controlar este proceso con técnicas adecuadas permite aumentar el rendimiento graso y obtener un aceite de mayor calidad.

Variables influyentes en el rendimiento graso

Condiciones climáticas

El clima afecta el desarrollo del fruto y la concentración de aceite. Condiciones de calor y baja humedad tienden a favorecer la síntesis de lípidos en la aceituna.

Carga del olivo

Un olivo con una carga controlada de frutos concentra mejor sus recursos, produciendo aceitunas con mayor contenido de aceite.

Variedad de olivo

Cada variedad tiene un potencial distinto de rendimiento graso. La selección de una variedad adecuada asegura una alta rentabilidad.

Cuidados del olivo

Los cuidados regulares, incluyendo poda, fertilización y control de plagas, optimizan el rendimiento general del olivar.

Cuidados y aplicaciones para el incremento de ácido oleico en la aceituna

El ácido oleico es el principal ácido graso del aceite de oliva, responsable de sus beneficios y estabilidad. Un manejo integral de nutrientes, agua y estrés hídrico contribuye a elevar el contenido de ácido oleico.

Maximizar el rendimiento graso de las aceitunas es un proceso que requiere una estrategia integral. La combinación de una buena gestión de riego, nutrición equilibrada, selección adecuada de variedades y control de plagas resulta en aceitunas con un alto contenido de aceite y una calidad óptima. 

Al aplicar estas prácticas, se logra un rendimiento rentable y sostenible, asegurando que cada campaña obtenga los mejores resultados en la producción de aceite de oliva.

En AGR, encontrarás el mejor aliado para mejorar tu cosecha de aceitunas, ya sea en plantaciones de olivo intensivo o de plantaciones de olivo superintensivo. Contáctanos y pregúntanos cómo podemos ayudarte.

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